Su madre se había mareado, él estaba en la cama y escuchó un golpe. Salió y la vio tirada en el baño. Enseguida llamó al 112.
Su entereza al teléfono y la forma en la que dio la información a los operadores del Servicio de Emergencias de Madrid no pasa desapercibida. Además tranquilizó a su hermanito de 6 años que estaba con él. Todo un ejemplo de madurez a sus once años. ESCUCHAR la llamada